Un recuerdo especial para los que nos precedieron y ya no están. No quiero recordarlos con tristeza sino con agradecimiento por haberlos tenido: familia, amigos, vecinos. Nadie es una isla, ni en el tiempo ni en el espacio, somos lo que heredamos y somos también un poco de los que nos rodearon, las palabras que nos alentaron, la compañía que nos brindaron, el abrazo que nos fortaleció, la risa que nos iluminó, el perfume de las vidas que nos acompañaron en algún momento del caminar. Por todos ellos una oración y una flor.
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