El 16 fue el día Internacional del pan. Anoté la fecha en la cartelera para no olvidarla pero ese día muy temprano me tomé un ómnibus para ir a ver a mi mamá, mis hijos y mis nietos. Y la fecha pasó. Así que hoy me levanté decidida a meter las manos en la masa. Me encanta hacer pan y si es para compartir con la familia y los amigos, mejor. La palabra en sí es de las que más me gustan. Está llena de connotaciones. Cuando alguien es bueno decimos " es bueno como el pan". Pienso lo que significó en la historia de la humanidad. Hubo que aprender a moler los granos, primero de una forma tosca y luego se fue perfeccionando la manera de hacerlo. Sin duda que el invento de la rueda y la domesticación de algunos animales estuvo presente en este proceso. Y la utilización de la energía de la naturaleza. Para tener granos no bastó la recolección, hubo que plantar y para preparar la tierra, plantar, cosechar y guardar el hombre se hizo sedentario.
La palabra pan se extiende a todos los alimentos. Solemos rezar a Dios: "Danos hoy el pan de cada día" Yo agrego: que a nadie le sobre, que se permita tirarlo y que a nadie le falte que tenga que robarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario