miércoles, 21 de septiembre de 2011

Mil soles espléndidos

"Vivirían en una casita a las afueras de alguna ciudad de la que nunca hubieran oído hablar(...) o en una aldea remota de callejuelas estrechas y sin asfaltar, pero bordeada de toda clase de plantas y arbustos. Habría un sendero que conduciría a un prado donde jugarían los niños, o quizá un camino de grava que los llevaría hasta un lago azul de aguas cristalinas, lleno de truchas y con juncos asomando a la superficie. Tendrían ovejas y gallinas, amasarían el pan juntas y enseñarían a leer a los niños. Forjarían juntos una vida nueva, pacífica y solitaria, y se librarían de la pesada carga que durante tanto tiempo habían tenido que soportar"(1)

Acostumbrados a nuestra cultura de tener y acaparar, este deseo de vida tal vez pueda parecer demasiado sencillo, pero cuando has sufrido física y espiritualmente, cuando has soportado una vida impuesta, cuando han humillado tu alma y quebrado tus dientes a golpes, cuando te has visto obligada a mirar a través de una burka y te han dicho que no vales nada, sabes exactamente lo que necesitas para ser feliz y vivir en paz.

Escrito por Khaled Hosseini, Mil soles espléndidos, cuenta la vida de dos mujeres afganas, Mariam y Laila en las que se reflejan los distintos momentos de su convulsionado país.


(1) HOSSEINI, Khaled. Mil soles espléndidos.2007.Salamandra, Barcelona pág.325

3 comentarios:

Unknown dijo...

No conocía a estas escritoras, me encantó el tema, costumbres de países tan diferentes, las buscaré.
Gracias por la recomendación.

rosa paseggi dijo...

El escritor es un médico Afgano que vive en USA. También escribió Cometas en el cielo. Ambas novelas son maravillosas, conmovedoras y hacen sentir lo que es el sufrimiento, la solidaridad y el amor en condiciones absolutamente adversas.

Assumpció dijo...

He leído las dos novelas y la verdad es que me impresionaron.
También he visto la película "Cometas en el cielo"
Aveces cuesta creer que sucedan hechos tan trágicos y que hayan maneras de vivir tan diferentes a la nuestra en una misma época. Creo que es un punto para la reflexión.
Un abrazo para todas.
Asun