jueves, 31 de julio de 2008

Y hay más de ñoquis...

Sigo con los ñoquis, otras cositas interesantes que encontré en: http://montevideanos.com

Los ÑOQUIS del 29
La palabra gnocchi (gnocchi es el plural de gnocco, cuyo significado es "bollo" y también "grumo", "pelotilla" en italiano) aparece frecuentemente en castellano como ñoqui o ñoquis. Los gnocchi o ñoquis están dentro de la categoría de las pastas y están elaborados de patata y sémola de trigo, harinas (pueden ser de maíz, castaña, etc.) y queso de Ricotta (con o sin espinacas). Una variedad muy conocida en las regiones de Friuli y Trentino-Alto Adigio y denominada gnocchi di pane se hace con pan rallado. Los gnocchi aparecen frecuentemente bajo los listados de platos referentes a pasta a pesar de tener unos ingredientes muy diferentes y de poseer diferente forma de preparación. Los acompañamientos de los gnocchi suelen ser salsa de tomate, mantequilla, coronados con hojitas de salvia. Los gnocchi en otras Gastronomías Es frecuente pensar que los gnocchi son típicos de la cocina italiana (cosa cierta), pero existen platos con similar preparación en la: cocina austriaca (Salzburger Nockerln), cocina alemana, cocina húngara, cocina eslovena, gastronomía rusa y en la cocina argentina.
Cocina de Italia En Italia el término "gnocchi" es usado para señalar a una cantidad de pastas bastante amplia; aunque -como se verá- los más frecuentes son los de patatas ( o, papas). Otros son preparados alla romana con sémola e incluso harina de maíz del tipo maicena; existiendo variaciones regionales y locales. Un antecedente de los ñoquis fueron los zanzarelli ("mosquitos") que se preparaban para los banquetes de la Lombardía renacentista, estos se preparaban con una masa en la cual se mezclaban miga de pan, leche y almendras trituradas. En el "Seicento" (s. XVII) los zanzarelli sufrieron un leve cambio en el nombre y la preparación. Se les llamó malfatti ("mal-hechos") y en lugar de las almendras y la miga de pan se usaba una masa simple de harina, agua y huevo. Para cada variedad de zanzarelli existían por su parte variedades coloreadas, por ejemplo existían los zanzarelli verdes empastados con remolacha y espinaca -predominando para el color verde, la espinaca-, así como los zanzarelli amarillos realizados con una mixtura de azafrán y calabaza. Luego aparecieron los malfatti blancos empastados con carne de pollo siendo su ingrediente principal en este caso la zanahoria. Los gnocchi son un plato tradicional del noreste italiano que luego se ha difundido a otras regiones. El origen de los gnocchi de papas (patatas) obedece a un motivo económico ocurrido en la Italia -aún bajo regímenes feudales y semifeudales- durante el s XIX, más precisamente hacia 1880: Los "signori" (señores feudales) solían ser los dueños de los molinos en donde los contadini (campesinos) molían el trigo para hacer harina de frumento (trigo) con la cual preparaban sus pastas, en cierto momento los signori decidieron aumentar las tasas de los precios que los contadini pagaban para poder moler el trigo. Ante el repentino encarecimiento de la harina de trigo, los campesinos italianos experimentaron exitosamente con un substitutivo de la harina: el puré de papas (patatas). Usualmente el puré de papas para ñoquis se prepara con añadido de leche e incluso manteca y una cantidad adecuada de harina de trigo (la mínima suficiente como para asegurar la cohesión del puré durante el hervor), más raramente con huevos. Este puré suele ser realizado con un elemento llamado "prensapuré" que hace más homogéneo y fino al puré sin necesidad de añadirle demasiada agua o leche (el puré para los ñoquis debe tener bastante consistencia), luego se hacen con esta "masa-puré" pequeños bollos (gnocchi) de casi una pulgada (se sabe que los ñoquis poseen la consistencia adecuada si al amasarlos no se pegotean en las manos ni en la mesa o mesada ni se desarman en el agua), para facilitar su cocción homogénea en el agua hirviente a la cual deben ser arrojados. Previamente se les producen unas pequeñas acanaladuras con un tenedor (aunque también existe un pequeño y sencillo instrumento ad hoc que produce tales acanaladuras al deslizar los bollos por éste). Como se ha indicado, los ñoquis se arrojan en agua hirviente y se retiran -mediante un colador grande- cuando estos flotan en dicha agua. En el área de la Toscana de Italia se suele ingerir con queso de ricota y espinacas, a esta variante la denominan strozzapreti, o estrangulador de curas. Puede que un cura se ahogara comiéndolos demasiado rápido y de ahí su truculenta denominación.
Cocina rioplatense El tipo de ñoqui más consumido en Argentina es el de papa, aunque también se consumen -en mucha menor medida- los de maicena, y en ocasiones se les colorea de verde con espinaca. Existen recetas aún más complejas, con ingredientes varios -por ejemplo puré de calabaza e incluso más refinados, por ejemplo con langostinos; ñoquis "soufflé" etc. Casi siempre los ñoquis se consumen al tuco con el añadido de queso rallado (tipo parmesano o tipo reggiano). En Argentina y Uruguay, donde la cocina italiana es tan popular, se denominan ñoquis. La costumbre hace que se coman el día 29 de cada mes, un día antes de la paga mensual, cuando la gente quizás se encuentra con menos dinero. Y a esta tradición se la denomina los ñoquis del 29*. Es costumbre dejar un billete debajo del plato para (por un pensamiento de "magia contagiosa") poder atraer de esta forma suerte y prosperidad al comensal. Y también, como los ñoquis no gustan especialmente a los niños, para animarlos a comérselos el día 29, se les pone unas monedas debajo del plato.

Y siguen los ñoquis

En esta página, http://montevideo.com.uy encontré estas noticias sobre los ñoquis. Aquí también encuentran recetas de distintos tipos de ñoquis. Hay que experimentar!

Ñoquis, el plato de la suerte
Saboreando este plato, la tradición asegura suerte por 30 días seguidos. Los más supersticiosos, comen apenas siete ñoquis, masticándolos siete veces cada uno. Otros los devoran todos, pues juzgan más importante que no haya sobras. Los gnocchis surgieron en Italia; pero los incrédulos afirman que la costumbre de poner dinero bajo los platos surgió en América del Sur, como estrategia de los restaurantes que necesitaban aumentar la clientela. El dinero deberá ser guardado todo el mes. Los más supersticiosos pragmáticos dirían ellos utilizan dólares en lugar de pesos. La moneda fuerte, que resiste a los tropezones del mercado, garantizará el futuro. La historia del plato La leyenda cuenta que un fraile llegó a una pequeña localidad italiana, un día 29, y tocó la puerta de una trattoria. Pidió un plato de comida y recibió el único alimento que había: ñoquis. Tiempo después, volvió al local y contó a los propietarios que, después de comer aquel plato, su vida había cambiado para mejor. La costumbre de comer ñoquis los días 29 puede ser relativamente reciente, pero la historia del plato es bastante antigua. Fue el primer tipo de masa casera. Spaghettis, ravioles y compañía son posteriores. Se supone que los ñoquis existen desde los tiempos de griegos y romanos. En Italia, los llamaron primeramente macarrones. En la Edad Media, ya eran conocidos con su nombre actual. Algunos estudiosos dicen que significa algo así como "pelota", ya que justamente son pelotitas de harina amasadas con agua. Los ingredientes de la masa fueron variando en el tiempo; comenzaron a ser elaborados con varias harinas, sobre todo de trigo. Mezcladas con agua, condimentadas con sal y cocidas en agua, eran alimentos sustanciosos. Años después, la masa fue enriquecida con espinaca, queso, castañas, carne o pescado. Luego de la introducción del maíz en Italia, a mediados del siglo XVI, surgió el ñoqui de polenta. Pero fue la llegada de la papa, entre los siglos XVI y XVII, quien cambió la historia del plato. El tubérculo americano se tornó el ingrediente más utilizado, aunque los ñoquis de harina y semolín siguen teniendo su prestigio. Los sicilianos crearon su propia versión; son famosos sus ñoquis a base de harina de trigo, ricotta de oveja, pasas de uva y albahaca. La receta de los romanos lleva semolín, se cocina en leche y va al horno con queso parmesano. En el pasado, los ñoquis eran una preparación característica de la cocina del norte y centro de Italia. Hoy, es de dominio nacional. Venció incluso la resistencia de los napolitanos, adeptos irreductibles de los espaguettis y otras masas largas. El éxito de los ñoquis llegó incluso a paíes vecinos. En Alemania y Hungría existe un plato similar, los "spätzle", que se acompañan con carnes asadas, o gratinado y servido en sopas. Los húngaros repitieron la receta, cambiando el nombre a "galuska", que se acompaña con el famoso "goulash", un guiso de carne conocido desde el siglo IX. Traiga suerte o no, el plato del día 29 es un clásico. Para el comilón, en tanto, la verdadera fortuna consiste en saborearlos.

Ñoquis, ñoquis, ñoquis...

ESTE MATERIAL (RECETA INCLUÍDA) LO ENCONTRÉ EN www.enlacesuruguayos.com

Por qué se comen ñoquis (gnocchi) los 29 de cada mes? La tradición de servir ñoquis los días 29 nace de una leyenda que se remonta al siglo VIII. Vivía entonces en Nicosia (Asia Mayor) un joven médico llamado Pantaleón, quien, tras convertirse al cristianismo, peregrinó por el norte de Italia. Allí practicó milagrosas curaciones por las que fue canonizado. Cierta ocasión en que pidió pan a unos campesinos vénetos, éstos lo invitaron a compartir su pobre mesa. Agradecido, les anunció un año de pesca y cosechas excelentes. La profecía se cumplió y otros muchos milagros. San Pantaleón fue consagrado -a la par de San Marcos- patrono de Venecia. Aquel episodio ocurrió un 29, por tal razón se recuerda ese día con una comida sencilla representada por los ñoquis. El ritual que lo acompaña de poner dinero bajo el plato simboliza el deseo de nuevas dádivas.

Ñoquis de Papa
INGREDIENTES 1kg de papas cocinadas en agua 2 1/2 tazas de harina 1 cucharada de aceite sal a gusto
PROCEDIMIENTO - Cocinar las papas, sin pelar, en abundante agua hirviendo. De esta forma se cocinarán en su propia humedad natural, y el puré será un poco más fácil de trabajar. Una vez cocinadas, pelar en caliente y hacerlas puré, preferiblemente con una purera para que resulte más suave y uniforme. Agregar la harina y el aceite, y mezclar hasta dejar una masa suave, sin amasar. Formar rollos del grosor de un dedo, cortar en trozos de unos 3cm de largo, pasar por los dientes de un tenedor para marcarlos y dejar secar en un lugar aireado, bien separados y enharinados, sobre un lienzo también enharinado. Puede agregarse un huevo batido a la masa para asegurar su consistencia y evitar que se deshagan en el hervor, pero otras opiniones prefieren la masa sin huevo porque de ese modo queda más tierna. Se cocinan en abundante agua hirviendo y con bastante sal. Deben dejarse caer en el agua hirviendo de a poco, cuando estén un tanto oreados. Los ñoquis se hunden cuando caen al agua y, cuando están listos, suben a la superficie y quedan flotando, por lo que es necesario retirarlos de inmediato, con espumadera, y ponerlos a escurrir unos minutos en un colador. Se colocan en una fuente de horno bañada en salsa; una vez completada la capacidad de la fuente se cubren con más salsa, se mezclan y se espolvorean con queso rallado. Van al horno unos minutos, para calentar solamente, y luego a la mesa.
Como esta masa, por sus ingredientes es muy suave, por lo general se acompaña con salsas también suaves y poco condimentadas. Una de las formas más usuales de servirlos es con salsa blanca y queso, gratinados al horno.

Ñoquis




Yo los hacía con la masa bomba (sin papa) o de sémola y me quedaban deliciosos.Hasta que descubrí que mi esposo era capaz de hacer unos ñoquis de película, de papas, deliciosos! Nunca más hice ñoquis. El especialista es él. Les pongo unas fotos de los de este 29,. y algún material sobre ñoquis que encontré por ahí. Débora hace unos de zanahorias y quedan fantásticos. También los he visto de mandioca.

domingo, 27 de julio de 2008

Hermanos Grimm




Encontré este libro en una librería de viejo, editado por Editorial Molino (Barcelona, España), en el año 1959. Tiene preciosas ilustraciones en blanco y negro. Esta del rey rana es para vos , Débora

Dragón

Este pequeño dragón no da miedo.Lindo ¿verdad?

Difícil elección

Qué calabaza preferiría Cenicienta para su carruaje? Estas son de mi huerta, y puedo ofrecerle la que quiera

Para iluminar el invierno





Gorro, bufanda y cartera, todo calentito para el invierno. Ya sé quien va a decir "Yo quiero, yo quiero todo, todo" Ahí van las fotos

sábado, 26 de julio de 2008

El chingolo

Encontré esta leyenda sobre el chingolo o gorrión en http://www.redargentina.com y aquí está

EL CHINGOLO
Dicen que el chingolo, el pájaro que anda a saltitos, y silba al cantar, tiene su historia. ¿Sabéis cuál es? Hela aquí: Un viejo tropero decíale siempre a su hijo: -Hijo mío, has nacido gaucho como tu padre y tu abuelo. Debes ser también, como ellos, un buen tropero... Sí, tropero... que es oficio de gaucho guapo y de ley. De día, silbando, silbando, se lleva la tropa de aquí para allá; de noche, cantando y mirando hacia el cielo, se cuida el ganado bajo las estrellas. Pero al hijo no le gustaba el trabajo, y menos aún el oficio que su padre le daba. Y el padre, empeñado en que su hijo fuera tropero como él, trataba de hacerlo entrar en razón con consejos unas veces, con castigos otras. Pero todo resultaba inútil: el hijo no cedía. No le gustaba la ocupación, y si alguna vez acompañaba a su padre, lo hacía con gran desgano y con mayor disgusto. Sucedió que una tarde, padre e hijo iban arreando una tropa y tuvieron que vadear un río de torrentosa corriente. Llegados a un paso muy hondo, los animales comenzaron a dispersarse. El viejo tropero ordenó a su hijo que impidiese el desbande. Tan mal cumplió el hijo la orden del padre, que éste decidió hacerlo por sí mismo. Internó su caballo en la hondura del río, y como allí había un remolino, la fuerza del agua lo arrastró bien pronto. No pudiendo nadar porque la resaca y la espuma lo envolvían, murió ahogado el viejo tropero. Lloró el hijo la muerte de su padre. Consideróse culpable de ella y comenzó a sentir un arrepentimiento profundo y un pesar muy grande. Queriendo tranquilizar su conciencia y pagar el mal que había hecho, decidió hacerse tropero. Así creía poder consolarse de la pena que lo embargaba. El muchacho se hizo tropero. Comenzó a encariñarse con el oficio; trabajaba en él con alegre afán. Silbaba de día mientras arreaba la tropa; o haciendo la ronda, cantaba de noche "mirando hacia el cielo". El silbido del tropero era más bien el suspiro de una alma que espera consuelo para su pesar. Pero el consuelo no llegó nunca; y la calma del joven tropero se convirtió en tormento. -¡Pobre padre! -pensaba- ¡No se cumplirán nunca sus deseos de hacer a su hijo un gaucho tropero!... Agobiado por el dolor y el arrepentimiento, confióle al fin su tristeza a un amigo, diciéndole: -La pena me tortura y no puedo resistirla. Pronto he de morir. Cuando mis huesos queden libres, arrójalos uno a uno a los pasos o vados de los ríos y arroyos por donde he pasado cuando acompañaba a mi padre, con gran desprecio del trabajo y mala voluntad para cumplirlo. Prometióle el noble amigo satisfacer su pedido, y después de un tiempo, así lo hizo. Dicen que el agua fue gastando poco a poco los huesos del tropero arrepentido, y que después de largos años, fueron esos huesos tomando la forma de huevos. Dicen también que de cada uno de esos huevos nació un pajarito. Ese pajarito es el chingolo. Anda a saltitos para recordarnos que aquel hijo que no amaba el trabajo y que desobedeció a su padre, no pudo llegar a ser feliz. Silba cuando canta, porque el tropero silba y canta de día y de noche azuzando la tropa en la soledad de los campos.

viernes, 25 de julio de 2008

El chingolo




Recibo todos los días la visita de un gorrión en mi patio. Por aquí también les llamamos chingolos. Así figura en este poema de Leopoldo Lugones que les pongo para acompañar las fotos de mi amigo gorrión.


El chingolo

Cuando el campo está más solo

y la casa, en paz, abierta,

aparece por la puerta,

muy sí señor, el chingolo.


Viene en busca de una miga

o una paja de la escoba,

que, ciertamente, no roba,

porque la gente es su amiga.


Salta, confiado, al umbral

y solicita permiso,

con un gritito conciso,

como pizca de cristal.

miércoles, 16 de julio de 2008

Nanas

Como tengo una amiga chiquita, Ana Paula, a la que no le gusta dormir me puse a buscar unas nanas para que su mamá le pueda cantar, porque parece que ha agotado las que sabía y el pícaro sueño no quiere venir. Las encontré en Imaginaria, http://www.educared.org.ar es una recopilación de Graciela Repún


Arbolito, arbolito
del campo verde
hazle sombra, hazle sombra,
mi amor se duerme.



Dormite mi niño que estás en la cuna,
que no hay mazamorra ni leche ninguna.
Dormite mi niño que estás en la hamaca,
que no hay mazamorra ni leche de vaca.
Dormite mi niño que tengo que hacer;
matar la gallina y hacer de comer.
Dormite mi niño que tengo que hacer;
lavar los pañales, ponerme a coser.



Duérmete, niñito,
que tengo que hacer;
lavar tus pañales,
ponerme a coser
una camisa
que te vas a poner
el día de tu santo,
Señor San Miguel.


Duérmete, mi niño
Duérmete, mi niño,
duérmete, mi sol,
duérmete, pedazo
de mi corazón.
San José y la Virgen
y Santa Isabel
andan por las calles
de Jerusalén,
preguntando a todos
por el niño Dios
y todos responden
que saben de él.



Duerme rosa y capullo,
duerme mientras te arrullo,
no quieras ya llorar.
Duérmete lucero, duérmete
que la noche cubre de sombras
el valle entero.

Este niño chiquito
no tiene cuna,
de limonero verde
yo le haré una.

Mamá te cantaba
la nana más bella.
Naciste de noche,
como las estrellas.
Te quiero mi niño,
mi dulce lucero,
tú eres la estrellita
más linda del cielo.

Mi niño chiquito
no tiene cuna;
su padre carpintero
le va a hacer una.


Mu, mu, mú, duérmete tú.
La mula y el buey
calientan al Rey.
Mu, mu, mú, duérmete tú,
estrella de Oriente
que alumbra a la gente.
Mu, mu, mú, duérmete tú.

Vacaciones de invierno

Me tomé un descanso, me dediqué a pasear con los nietos. Aunque Paloma dice que ahora, después de las vacaciones de julio, es que tengo que descansar por todo el trajín con los niños.Las vacaciones parecieron de primavera, por el calor,pero humedad y calor mediante aprovechamos para pasear mucho, recorrer las ferias,comer mucho pororó, comprar retazos increíbles y libros usados, me traje algunos de Enid Blyton para releer los que leí en mi infancia, alguno de Obaldía, uno de Andersen y uno de Rodari que le encantó a Mateo y me dijo : ¿Me lo regalás? Por supuesto que sí.
Fuimos al Solís con Lupe, Mateo y Pilar a ver Ambrosio, el campanero de la Matriz, un espectáculo que combina títeres, danza, canto, música y animación. Imperdible. Y También vimos en el cine: Narnia, el príncipe Caspian.
Con los grandes disfrutamos de Bodas de sangre y Esperando la carroza.
Unas hermosas vacaciones