jueves, 30 de junio de 2011

Invierno

Ya está. Ya se instaló. A encender la estufa.


-¿Qué es esto?


Fiona nunca había visto fuego en la estufa. Pero ya descubrió sus beneficios.


A sacar agujas y lanas. A preparar un rico chocolate. Y ahora que los niños están en vacaciones de invierno hay que ingeniarse para entretenerlos cuando no pueden salir a jugar, porque no todo es tele y computadora. Días pasados estuve en la escuela de mis nietos donde se realizó una merienda compartida con los abuelos. Los niños y las maestras descubrieron las viejas rondas ¡Aplausos! Y ayer Lupe fue a pasar la noche en casa de una amiga, cuyos papás organizaron un bingo para un grupo de compañeras de clase. Buenas ideas. Para los peques aquí les dejo algo:




¿DÓNDE VA DE MAÑANA
LA NIÑA BLANCA,
SI LA NIEVE HA CUAJADO
POR LA MAÑANA?
CUANDO SUBE A LA SIERRA
LA NIÑA BLANCA,
AL ARROYO, LA NIEVE
HUYE DE ENVIDIA.


(Lope de Vega)




EL SOL TIENE FRÍO,
NO QUIERE SALIR,
METIDO ENTRE NUBES
SE HA PUESTO A DORMIR.
LOS PÁJAROS PIDEN
UN RAYO SOLAR,
SIN ESA CARICIA
NO PUEDEN VOLAR.
POR LAS CALLES DEL CIELO
QUE SE DEJE VER
QUE TODOS LOS NIÑOS
QUEREMOS CORRER
(Ida Rebolo)

SOPLA QUE TE SOPLA
LLUEVE QUE TE LLUEVE,
MONTADO EN EL VIENTO
EL INVIERNO VIENE.




Poemas encontrados en http://www.pacomova.es/

martes, 28 de junio de 2011

La torta de Lupe

Para la kermesse del club Lupe hizo esta torta. Es una receta Royal y es tan rica que la dejo por aquí.

Ingredientes:

Para la masa
5 huevos
Media taza de azúcar
3/4 taza de harina
1cdta. de polvo royal
1/4 taza de cacao

Para el relleno:

250gr de dulce de leche


Lupe la decoró con un baño de esos que ya vienen prontos.




Rosas para Carina

¡Feliz cumple, Carina!!!

lunes, 27 de junio de 2011

San Juan



Desde las doce de la noche del 23 celebramos San Juan. Es el aniversario del Nacimiento de San Juan Bautista. Fiesta que hunde sus raíces en distintas culturas y llena de connotaciones mágicas en el imaginario popular. Hemos hablado del asunto en años anteriores. Yo recibí, de mi nieto, en la mañana de San Juan, siete monedas que permanecieron en el patio durante la noche y que no debo gastar hasta el año próximo. Que Mateo se haya desprendido de siete monedas de su alcancía para regalármelas es un acto de amor que valoro profundamente. Gracias, Mateo, la generosidad se ejercita desde pequeño.



Imagen tomada de www.aciprensa.com/santos




martes, 21 de junio de 2011

Para días fríos y lluviosos; torta tía Alba

Los días fríos y lluviosos son una excusa. Esta torta la hacía la tía Alba. Si ella te servía un plato de deliciosa sopa seguro que venía su torta de dulce de leche, de postre. Es una básica de manteca aunque yo suelo sustituir ésta por media taza de aceite. Queda más húmeda. Los ingredientes son:

Una taza de azúcar
100gr de manteca
Dos huevos
Dos tazas de harina
Cantidad necesaria de leche
Ralladura de limón
Dos cucharaditas de polvo de hornear
Dulce de leche

Después que se vuelca la preparación en el molde colocamos por encima unas cucharadas generosas de dulce de leche. Unos 25-30 minutos de horno. Sale dorada con pequeños cráteres donde el dulce hace burbujas. Me gusta comerla tibia.


Un secretito: se puede sustituir media taza de harina por fécula de maíz o por harina de maíz, esa bien finita que se consigue pasando la frontera, farinha de milho tipo creme.

Celeste




Si te asomas a La Sombrera verás en qué hemos estado ocupadas.




martes, 14 de junio de 2011

La sopa de la abuela



LOS PUCHEROS


a veces

en las tardes serenas del invierno

cuando me pongo a recordar el tiempo

me acuerdo del tiempo aquel

cuando en mi casa de infancia

los jueves afelpados de lluvia

comíamos puchero
el aire era liviano la cocina oscura

la ventana era chica y el amor era grande

mi madre entonces llegaba con la fuente

jubilando la carne y los chorizos

sus aromas picantes

silencioso el zapallo esplendía

su amarillo sabroso

rozagante la papa y el boniato discreto

con los choclos naranjas

que la gente menuda disputaba riendo

los humildes garbanzos zanahorias pimpantes

los abiertos repollos como rosas de tierra

ahora

a veces

recuerdo

esos pucheros de los jueves de lluvia

durmiendo suavemente

a lo largo del tiempo


Jorge Arbeleche(uruguayo)




No era especialmente los jueves cuando en mi casa comíamos puchero pero pensé que este poema de Jorge Arbeleche vendría muy bien aquí. Yo recuerdo el puchero de la abuela; no era de mi gusto todo lo que mostraba la fuente humeante pero el caldo que resultaba de aquella cocción era magnífico. Con el caldo hirviendo y la fariña (harina de mandioca) el abuelo hacía el pirón. Como siempre quedaba caldo para el otro día, la abuela solía sorprendernos, a veces con el pan del día anteior cortado en cubos y tostado flotando en la sopa o con sus pelotitas verdes. Hacía éstas cocinando acelga, escurriendo y cortando luego. Agregaba huevos, algo de harina, algo de leche e iba dejando caer esta pasta con ayuda de una cucharita en el caldo caliente. Era la única forma en que que yo toleraba la acelga.


Hace unos días en Cocineros argentinos hicieron algo parecido pero sin acelga, entonces recordé la sopa de la abuela y decidí improvisar. La sopa ya estaba lista. Puse en la licuadora una taza de espinacas cocidas y bien escurridas, dos huevos, cuatro cucharadas de harina, dos cucharadas de queso parmesano, un chorro de leche y al final agregué una cucharadita de polvo de hornear. Tiene que quedar una masa espesa. Con una cucharita fui colocando la masa en el caldo y después me senté a saborear un plato de infancia. Pruébenla, usen como base cualquier caldo que tengan, la sopa de ayer o el caldo que congelaron la semana pasada, incluso alguno instantáneo. Ideal para el invierno.

sábado, 4 de junio de 2011

Betty Boop








La vi en una vidriera y resolví que yo podía hacerla. Claro que no fue soplar y hacer botella, como decía mi abuela. Mucho rato midiendo, calculando proporciones, trazando moldes y tirándolos a la papelera hasta que resolví que podía ponerme a coser. No está perfecta y espero seguir hasta que lo sea. Un exceso de confianza me hizo hacer un desastre en la cara y tuve que pintarla toda de manera que el rostro perdió la textura de la tela piel. Pero no me aguantaba sin mostrarla.